Perdonen las ausencias. Pava Eme se fue de fin de semana y estos días se encuentra extasiada, descubriendo nuevos profesores del segundo cuatrimestre con tics extrañísimos que desconcentran un montón a la hora de coger apuntes (cosa que, ya de por si misma, le cuesta, sin necesidad de ayudas externas. Si ya le cuesta ir a clase...) y Pava Erre está siendo debidamente explotada por su jefe (trabajo que dejará en cuanto se empiecen a cumplir nuestros planes de la entrada anterior, por supuesto) Con lo cual se nos hace un poco difícil sincronizar los relojes para atender ésto.
Inauguramos sección: Historias de trenes
¿Alguna vez os ha ocurrido algo insólito? Cuando a nosotras individualmente nos pasa algo raro raro raro, una de esas anécdotas de las que cuando las estás viviendo te planteas “¿dónde está la cámara oculta?”, acabamos haciendo una conjetura que es casi igual para las dos… sólo cambia el nombre: “Anda que, lo que no me pase a mí… ya sólo le puede pasar a Pava Eme/Pava Erre”.
Encabezan el ránking sendas historias, (una para cada una) La que protagoniza Pava Eme tiene como elementos principales madrugada, ingestión masiva de rusos blancos y tequila, tren equivocado, susto al despertar en lugar desconocido y señora rescatadora en bata a las 6 y media de la mañana; la de la Pava R. tiene la noche bien entrada sin dinero ni móvil, el fin del horario del Metro, trasbordo imposible, vuelta al vagón, pensamiento de "así sólo me alejo", Casa de Campo con sus correspondientes señoritas de moral distraída, chulos y yonkis y coche de policía. La primera fue redactada por su protagonista en su propio fotolog en su día; la segunda jamás vio la luz en el mundo de internet, porque su principal personaje jamás tuvo huevos (por muy pava que sea xDDD) a contarlo siquiera en su ámbito familiar… su única audiencia han sido algunas personas humanas sobre la faz de La Tierra. Algunos elegidos.
En cualquier caso, no son las únicas historias increíbles y para no-normales que hemos vivido, y, damos por hecho que tampoco serán las últimas. Nos quedan tantas por vivir...asín que, las que sean medianamente relatables y no contribuyan mucho a destrozar nuestra imagen pública, las contaremos aquí bajo el título "Historias de trenes", en honor a nuestras dos grandes pavadas.
Ahora sólo faltaba que, después de cortar la cinta roja de la sección, no nos pase nunca nada más extraño. Con lo cual nos plantearemos si no deberíamos haber creado este blog hace muuucho tiempo, evitando así estos sustos que nos van a llevar en cualquier momento a una cardiopatía con resultado de muerte. (La sección "hipocondrias", para otro día)
miércoles, 27 de febrero de 2008
jueves, 21 de febrero de 2008
Agradecidas, emocionadas...
Dicen que todos los comienzos son difíciles...pero la verdad es que, a pesar de algunas trabas - mayormente informáticas - nos lo estamos pasando genial con éste, nuestro proyecto en común. Es un poco raro llamar "nuestro proyecto en común" a algo así, porque suena a hipoteca, o incluso a hijo, y:
1- Somos pareja artística, no sentimental.
2- No estamos en edad de tener hipoteca. (Ni hijos)
3- Aunque estuviéramos en la edad, definitivamente no estamos en las condiciones económicas para tenerlos. (Ni la hipoteca, ni los hijos)
De aquí el nacimiento del blog. Porque con una de las pavas con la carrera terminadísima, recibiendo las primeras bofetadas del mercado laboral, y la otra a puntito de terminarla y sin saber qué hacer con su vida, tooooodo el mundo nos aconseja opositar.
Y no queremos opositar: tenemos un plan mejor.
Todavía no tenemos muy claro cómo, pero este blog se convertirá en página de culto. Tendremos cienes y cienes de fanes; un día llegará un cazatalentos cibernético (sabemos que eso existe gracias a la muy recomendable peli "Juno", escrita por una ilustre bloguera) y quedará prendado de nuestras historias y nuestro fino humor. Impulsará nuestro salto al estrellato consiguiéndonos actuaciones en la Paramount Comedy. Pasaremos a ser colaboradoras habituales en Sé lo que hicistéis (Probablemente tengamos un tórrido romance con Ángel Martín y Dani Mateo, aunque lo guardaremos en nuestro fuero interno porque no nos gusta alardear de nuestras - muchas - conquistas) Buenafuente nos llamará para entrevistarnos en su programa y la audiencia se disparará. Hasta que, finalmente, nos den nuestro propio programa en la Sexta. Y entonces, cuando tengamos una mansión más grande que la de Jose Luis Moreno (y esperamos que también más segura) nos reiremos de las oposiciones que nunca hicimos.
Lo de llegar a dominar el mundo aún nos lo estamos pensando. Ante todo, somos realistas y no queremos fijarnos metas imposibles (que se lo digan a Stewie Griffin)
Por si las moscas, vamos a empezar yendo de amiguitas vuestras, para que una vez que estemos en la cumbre, nos recordéis como estas dos cándidas y amables jovencitas que ahora mismo os dan la bienvenida a este Blog. Pasad y coged sitio; hay sándwiches de nocilla y coca-cola para todos.
Solamente podemos decir: ¡gracias por venir! =)
1- Somos pareja artística, no sentimental.
2- No estamos en edad de tener hipoteca. (Ni hijos)
3- Aunque estuviéramos en la edad, definitivamente no estamos en las condiciones económicas para tenerlos. (Ni la hipoteca, ni los hijos)
De aquí el nacimiento del blog. Porque con una de las pavas con la carrera terminadísima, recibiendo las primeras bofetadas del mercado laboral, y la otra a puntito de terminarla y sin saber qué hacer con su vida, tooooodo el mundo nos aconseja opositar.
Y no queremos opositar: tenemos un plan mejor.
Todavía no tenemos muy claro cómo, pero este blog se convertirá en página de culto. Tendremos cienes y cienes de fanes; un día llegará un cazatalentos cibernético (sabemos que eso existe gracias a la muy recomendable peli "Juno", escrita por una ilustre bloguera) y quedará prendado de nuestras historias y nuestro fino humor. Impulsará nuestro salto al estrellato consiguiéndonos actuaciones en la Paramount Comedy. Pasaremos a ser colaboradoras habituales en Sé lo que hicistéis (Probablemente tengamos un tórrido romance con Ángel Martín y Dani Mateo, aunque lo guardaremos en nuestro fuero interno porque no nos gusta alardear de nuestras - muchas - conquistas) Buenafuente nos llamará para entrevistarnos en su programa y la audiencia se disparará. Hasta que, finalmente, nos den nuestro propio programa en la Sexta. Y entonces, cuando tengamos una mansión más grande que la de Jose Luis Moreno (y esperamos que también más segura) nos reiremos de las oposiciones que nunca hicimos.
Lo de llegar a dominar el mundo aún nos lo estamos pensando. Ante todo, somos realistas y no queremos fijarnos metas imposibles (que se lo digan a Stewie Griffin)
Por si las moscas, vamos a empezar yendo de amiguitas vuestras, para que una vez que estemos en la cumbre, nos recordéis como estas dos cándidas y amables jovencitas que ahora mismo os dan la bienvenida a este Blog. Pasad y coged sitio; hay sándwiches de nocilla y coca-cola para todos.
Solamente podemos decir: ¡gracias por venir! =)
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